Encontré unas notas que escribí en junio del 2011, durante mi formación como terapeuta Gestalt Integrativa. Compruebo que hoy, siete años después, continúan vigentes y me llegan al corazón. Comparto contigo mis reflexiones de vida sobre el mandamiento “honrar a padre y madre”.
Imagino que te preguntarás, ¿y qué tiene que ver esto con los fundamentos de la Gestalt? Repasemos brevemente: presencia, consciencia y responsabilidad. Presencia es la habilidad de vivir el instante presente con todos los sentidos. Consciencia es la actitud de observar las experiencias del aquí y el ahora, y darse cuenta de qué sucede contigo adentro y afuera. Responsabilidad es asumir tu vida y las consecuencias de tus acciones desde un lugar adulto. Así que, aquí y ahora, reviso mis notas, observo y registro mis emociones y sensaciones al releer, 6 años después, estas reflexiones, y elijo, decido, compartirlas con mis lectores. Te invito a que, durante los minutos que te tome leer las anotaciones que encontrarás a continuación, observes con mucha presencia y consciencia tu respiración, tus emociones, tus sensaciones. Esa es una actitud gestáltica.
Hoy finalmente, a mis 43 años, le encuentro sentido a este gran mandamiento. Hoy doy gracias a mi padre y a mi madre por darme la vida, por haberme permitido, a través de su humanidad, llegar a este planeta a disfrutar esta experiencia terrenal. Hoy doy gracias a mi padre y a mi madre porque me dieron todo lo que podían darme desde su gran amor.
Hoy elijo ver a mi padre y a mi madre con una mirada compasiva, desde el amor y la comprensión, entendiendo que con mi consciencia y mi equilibrio puedo empoderarlos y acompañarlos, si es posible, a alcanzar sus sueños o, por lo menos, a tener una madurez y una vejez de calidad.